18 de septiembre de 2012

Presentación RONGORONGO en CARTAGENA

El pasado lunes 17 de setiembre, tuve el inmenso placer de presentar Rongorongo en la emblemática Librería Escarabajal de la ciudad de Cartagena, un marco incomparable, un lugar con magia, con solera, con 120 años de historia. Su propietaria, Ana Escarabajal, y Manuel Acosta, tuvieron la enorme amabilidad de acogerme cálidamente en tan exclusivo local. Y para colmo, por circunstancias que parecen haber sido cuidadosamente tejidas por el destino, tuve el honor de compartir presentación con el escritor e investigador de la cultura rapanui Arturo Frontier, residente en Isla de Pascua desde hace 50 años y autor de varios libros sobre su apasionante historia, quien nos brindó sus conocimientos de primera mano sobre la isla y su cultura. Un personaje entrañable con quien compartí no sólo la presentación sino todo el fin de semana en la increíblemente bella ciudad de Cartagena, aprendiendo, aprendiendo mucho, y junto a alguien que también con toda generosidad me ha ayudado y apoyado durante mi estadía en Cartagena: Juan Cayuela. ¡Qué suerte la mía!
Vista de la Librería Escarabajal en el momento de la presentación. Con Ana Escarabajal y Arturo Frontier
Con Arturo Frontier

Comenzó Ana Escarabajal presentándonos a Arturo y a mí, comentando algunas cosas sobre nosotros y sobre nuestros trabajos, y opinando sobre su lectura de Rongorongo, en lo que más tarde profundizaríamos en una amena conversación. Luego tomó la palabra Arturo quien también habló del libro (que lo había leído hace un tiempo en la isla), y cuando me tocó el turno, suelo pasar un pequeño vídeo con un fragmento del himno rapanui, el I’He A Hotu Matu'a, detalle que quizá para nosotros en España carezca de significado, pero que es relevante para los habitantes de la isla, para acto seguido pasar una presentación en Power Point. Nos falló el equipo audiovisual, pero rápidamente improvisamos y explicamos algunas cosas sobre la escritura rongorongo, los problemas para conocer su origen, datación, posibles significados y las investigaciones en curso, entre todos, lo que marcó la diferencia con anteriores actos. A veces resulta difícil hablar tanto de las tablillas rongorongo, para llegar a la conclusión de que por mucho que disertemos, poco hay para decir en concreto sobre estos temas de los que tanto se ha especulado. Pero ayer la presencia de Arturo nos abrió los ojos hacia nuevas perspectivas que tal vez deberían cambiar radicalmente nuestra visión sobre cómo abordar el asunto. Un verdadero enigma de improbable solución desde nuestro punto de vista occidental, y que me llevó a elegirlo como telón de fondo para Rongorongo, pero que quizá algún día logremos comprender si conseguimos “ver” con otros ojos. Tras ello, invitamos a los asistentes a formular dudas y preguntas, lo que resultó en un divertido e interesante diálogo sobre el libro y las tablillas rongorongo y la cultura rapanui en general. 
Con Ana Escarabajal y Arturo Frontier. En la mesa: moai de madera y kohau rongorongo de mako'i 
Con Ana Escarabajal y Arturo Frontier. Primer plano: kohau rongorongo y Rongorongo
Con Arturo Frontier
Como podréis adivinar, resultó una especialísima velada, en la que todos los factores (el espacio físico, su contenido, los anfitriones y compañeros de presentación) se conjugaron para hacer posible que esta cuarta vez que presento el libro (las dos primeras fueron en Barcelona y la tercera en Valencia), haya sido particularmente emotiva. Ya lo he dicho otras veces, cada vez es diferente, y eso hace que no se agote la capacidad de sorpresa y alegría, aunque todas tienen un común denominador: el compartir. Y cada vez, en cada lugar, y en cada ciudad, me encuentro con personas a las que deseaba ver o conocer, y que contribuyen con su interés, con sus preguntas y sus dudas manifestadas en público, el interés que les despierta Rongorongo y la cultura rapanui en general. En Cartagena, además de Juan Cayuela y Arturo Frontier, he tenido el enorme placer de conocer a tres personas con las que tenía contacto sólo por internet: Ana Escarabajal, Manuel AcostaAna León y Quiteria Méndez.  Terminamos, por supuesto, con la acostumbrada firma y dedicatoria de ejemplares. En definitiva, he recibido mucho cariño y apoyo ayer, de amigos que con su inestimable colaboración, o simplemente con su presencia, consiguieron una vez más que el mero acto de presentación de un humilde libro, se transforme en un encuentro entrañable y lugar de tertulia y discusión entre todos los presentes. Una emotiva celebración, en la que pude compartir el fruto de un trabajo de meses, que contiene una parte importante de mi universo personal desde que en 2003 tuviera la fortuna de pisar por primera vez aquel trocito de tierra en el medio del océano: Te Pito o Te Henua. Mauru’uru korua! 
Ana Escarabajal, Manuel Acosta y Arturo Frontier
Firmando un libro a Quiteria Méndez
Anuncio de la presentación de Rongorongo en el escaparate de la Librería Escarabajal

2 comentarios:

  1. Un lugar especial para una presentación especial. Seguramente los restos históricos-culturales de los Tartesios cartagineses, romanos y musulmanes ayudaron a ello.

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    1. Sin duda Miguel, es una ciudad con una carga histórica muy fuerte.

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